Ahora cada vez se nota más tu embarazo. Probablemente sentirás un poco de molestias por el crecimiento del útero en los lados. Si son persistentes o insoportables consulta a tu doctor. En este momento tu bebé es del tamaño de tu mano extendida.
La piel del bebé se recubre de un vello suave y delgado llamado lanugo, el cual desaparecerá casi por completo antes del nacimiento.
En esta etapa algunos bebes se chupan el dedo. El cuello se alarga y la cabeza no está tan doblada hacia el pecho.
Sus desplazamientos empiezan a ser amplios, ya que el líquido amniótico que rodea al feto se lo permite.
La grasa es muy importante para el desarrollo del metabolismo y otros procesos que realiza el cuerpo humano.
Por lo general, los padres se maravillan de la suavidad de la piel del recién nacido. La piel de su bebé, que se ha estado formando continuamente, es tan fina y translúcida que pueden verse los vasos sanguíneos a través de ella.
El desarrollo de los músculos sigue en desarrollo y es probable que el bebé esté realizando muchos movimientos con la cabeza, la boca, los brazos, las muñecas, las manos, las piernas y los pies.
hay mujeres que hasta que no ven el incremento de su abdomen no toman consciencia de su embarazo. Muy probablemente empiezas a asumir tu embarazo cuando tu ropa de todos los días te deje de quedar.
De un momento a otro puedes sentirte alegre, con miedo, atolondrada o despistada. Hasta las mujeres más organizadas reconocen que el embarazo afecta su capacidad de organización, volviéndolas más olvidadizas, torpes y menos capaces de concentrarse. Trata de no estresarte y tómate con calma estos “lapsus mentales”, ya que son pasajeros.
En esta etapa del embarazo por autorización de tu medico puedas empezar hacer algo de ejercicio como caminar, nadar o practicar yoga