Existen muchas razones por las cuales nuestra boca no guarda en buen olor, puede tratarse desde una caries, hasta una infección o incluso nuestra alimentación. Por ello debemos realizar ciertas actividades que nos ayuden a mantener un buen aliento.
- Limpia toda tu boca. Cepilla tus dientes durante tres minutos después de cada comida, y por la noche completa esta limpieza con un hilo dental y un raspador de lengua. De esta manera podrás eliminar hasta en un 50% las bacterias orales.
- Vigila tu nariz. En ocasiones el mal aliento puede deberse a infecciones en los senos para nasales. En este caso es muy importante que visites al médico, pero puede ayudarte con mezclas de eucalipto o infusiones de flor de malva, haciendo enjuagues cuatro veces al día.
- Cuida tu hígado. Si al despertar por la mañana sientes un gusto amargo en la boca, tal vez ha llegado el momento de eliminar toxinas. Si este es tu caso, lo más recomendable es consumir verduras cocidas o crudas durante dos días, además intenta limpiar el consumo de grasas y azucares.