En la actualidad los padres nos encuentramos con una realidad completamente diferente a la que vivieron nuestros padres con nosotros, ahora los niños Todos los niños son hiperactivos, son niños que deciden en vez de ser guiados y una educación en donde prevalece la permisividad.
Se dice que los niños se frustran y asustan si se los educa utilizando sistemas autoritaristas donde el padre o ambos imponías sus criterios y los hijos debían acatarlos sin peros. En la actualidad se frustran y tienen derechos.
Si queremos saber cómo fortalecer la autoestima de nuestros hijos, los derechos de los niños no deben ser confundidos, es decir, no debe imperar la permisividad y la falta de límites pues es altamente nocivo para su formación.
Encontrar un equilibrio es fundamental para poder darles las herramientas necesarias que necesitarán en un futuro y es donde juega un papel sumamente importante la autoestima.
Este sentimiento está referido al valor que tiene el ser humano ante sí mismo, el sentimiento de paz que se tiene consigo mismo y que está estrechamente relacionado con el tipo de educación que se basa en los límites.
Son los padres los responsables de enseñar a vivir a sus hijos y como adultos, es trascendental transmitir la importancia de reconocer errores, fomentar el sentido de la responsabilidad, la importancia del trabajo y del compromiso hacia uno mismo y los demás.
Cuando un niño tiene confianza en lo que hace, si se siente desorientado ante determinada situación, entonces pedirá ayuda a quienes siempre se la han brindado, sus padres.