A los pequeños entre los dos y tres años debemos empezar a entrenarlos para dejar el pañal sin embargo este cambio debe hacerse con paciencia y mucho amor .
Por lo general empiezan a tener ciertos comportamientos que pueden ayudarnos a tomar la mejor decisión de empezar a quitarle el pañal la mayor parte del tiempo. Debemos detectar cuatro etapas en el bebé en este camino:
- Se hace pipi y le resulta indiferente.
- Hace pipi y avisa posteriormente. En ocasiones quiere quitarse el pañal porque le molesta por lo que distingue entre pañal seco y mojado.
- Avisa mientras está haciendo pipi, por lo que ya es capaz de identificar el momento.
- Avisa antes. Ha conseguido detectar la sensación que le indica que quiere ir al baño.
En todos los niños dejar el pañal es un proceso de maduración y no esta ligado con la edad y cada pequeño tiene su tiempo, por lo que no debemos intentar hacer que nuestros hijos utilicen el baño porque algún vecino, primo o amigo ya lo esté haciendo.
Con estos tips puedes conseguir de manera fácil y sin convertirlo en un problema para el niño:
1. Esperar a que estén preparados: Hay niños que desde los 18 meses ya pueden dejar el pañal. Hay que estar atento a los indicadores para que cada niño lo haga en su momento más apropiado.
2. Ropa cómoda: Si utilizan pantalones o faldas con cinturilla elástica los niños pueden subir y bajarlos, así ellos van cobrando autonomía y se les hace más sencillo acudir al baño. Puede también utilizar sandalias de playa que si se mojan pueden lavarse y secarse al momento.
3. Ir paso a paso: Los niños no dejan el pañal de un día para otro. Es como un entrenamiento y cada vez darán mejores resultado. Es importante respetar su ritmo.
4. Sensaciones extrañas: Es la primera vez el niño decide controlar la satisfacción de sus necesidades lo que le produce nuevas emociones. Además, lleva desde que nació con pañal, desprenderse de él le puede hacer sentir incómodo.
5. Convertirlo en un juego: Es más sencillo jugando y así estará más motivado. Contar historias, paneles con pegatinas, rutinas divertidas para animarle a ir al baño.
6. Perioricidad: Para que se pueda ir acostumbrarlo y mientras llega el momento en que avisa siempre que tiene ganas de hacer pipí, hay animar a los niños a utilizar el inodoros portatiles cada dos horas más o menos. Así irá adquiriendo el hábito.
7. Imitación: Cuando los niños van a guarderías pueden ver cómo otros utilizan el inodoro y si están preparados querrán hacerlo también.
8. Felicitación: En cada etapa hay que reconocerle su capacidad. Así, cuando avise de que se está haciendo pipí o de que acaba de hacérselo en el pañal, hay que celebrarlo para que tome confianza y conciencia de sí mismo. Posteriormente debemos felicitarle cada vez que haga consiga ir solo.
9. Evitar el estreñimiento: Algunos niños pueden estreñirse al quitarles el pañal, ya que defecar requiere de más tiempo y ‘concentración’. Si no lo logran, se puede consultar con el pediatra para evitar el estreñimiento.
10. Paciencia: No debemos olvidar que el proceso de control de los esfínteres no es lineal, sino que tiene avances y retrocesos. Debemos evitar las frustraciones si vuelve a hacerse pipí ofreciéndoles seguridad sin convertirlo en algo negativo que le ridiculice.