Pruebas que se deben realizar a los recién nacidos

 

Una vez que tu bebe ha nacido hay varias pruebas que se deben practicar para valorar el estado general y particular del pequeño

El test de Apgar.- Es un examen muy sencillo, que se realiza entre el primer y el quinto minuto después del nacimiento para determinar la condición física del bebé. Sus resultados determinan el tipo de ayuda que puede necesitar el neonato para establecerse en ámbito extrauterino.

La puntuación de la prueba se valora en una escala de 0 a 10, donde obviamente 10 es la puntuación del bebé más sano. Un valor inferior a cinco, indica que el bebé necesita algún tipo de ayuda médica para adaptarse al nuevo ambiente.

En este caso el médico puede recomendar tanto un corto periodo de observación en la incubadora, como el ingreso en la planta de Neonatología para investigar el por qué de la dolencia.  Que el bebé obtenga un valor de 10 es muy inusual, en general los recién nacidos suelen perder algún punto en la coloración de la piel, ya que es habitual que nazcan con los pies y las manos un poco azulados.

Un resultado del test de Apgar entre 8 y 10 corresponde a un recién nacido que se encuentra en buenas condiciones físicas, mientras que cualquier valor inferior a 8 puede indicar que el niño necesita algún tipo de ayuda.

Pruebas de diagnóstico precoz.- Una vez cumplidas las primeras 48 horas del nacimiento, se le realiza al bebé una prueba para detectar enfermedades metabólicas.

Una sencilla prueba que se trata de la obtención de sangre del talón y pruebas de audiometría.  A través del análisis de la sangre obtenida, los médicos pueden diagnosticar un total de 29 trastornos metabólicos. Los defectos metabólicos pueden causar problemas físicos, retraso mental e incluso el fallecimiento del bebé. Poner soluciones a tiempo es fundamental: en algunos casos el bebé necesitará un equipo de médicos especializado y en otros, por ejemplo cuando se detecta hipotiroidismo, tan sólo tendremos que tratar al bebé con hormonas orales.

La prueba de audiometría.-
Valora la capacidad auditiva del bebé, si no fuese adecuada cabría la posibilidad de colocar ayudas auditivas al bebé antes de los seis meses. Actuar con antelación puede evitar ciertos problemas futuros, como el desarrollo del habla y el lenguaje.