La abundancia es un estado de la vida que nosotros somos los únicos capaces de manipularlo con nuestro pensamientos.

Debemos estar en equilibrio con nuestros pensamientos y nuestro trabajo para que todo se conjugue en armonía y atraerlo a tu vida  mediante un proceso simple y natural si comienzas con estos tres pasos:
1: Crear en vez de Arreglar

Para atraer mejores circunstancias, es importante que recuerdes que es más fácil atraer una condición totalmente nueva, que arreglar o rehacer algo que ya existe. Las circunstancias de tu vida están aquí debido a tus pensamientos y creencias del pasado, y no puedes cambiar las cosas que pensaste y creíste anteriormente.

Lo que sí puedes hacer, es comenzar a pensar y creer de manera diferente hoy. Mientras pienses y creas de una nueva manera, comenzarás a formar nuevas circunstancias que encajarán mejor con tus deseos actuales. Recuerda que tus circunstancias actuales fueron probablemente creadas por defecto. Ahora que ya sabes cómo elegir algo mejor, tendrás mucho más control sobre lo que aparezca en tu vida en el futuro.

 

2: La práctica te lleva a la perfección

Es importante concentrar tu atención en algo por un período de tiempo extenso ayuda a entender y asimilar el conocimiento más fácilmente.

Como vaya pasando el tiempo la tarea o actividad se vuelve un hábito y parece casi natural hacerla, simplemente por haberlo hecho tantas veces anteriormente.

Debes entender  que tus pensamientos, estado emocional y creencias todas trabajan juntas para atraer eventos y experiencias correspondientes, solo entonces sabrás exactamente qué hacer para crear el tipo de vida que tú deseas.

Recuerda debe haber un período de práctica que te permita desarrollar tu talento y mantenerte trabajando en ello, hasta que eventualmente se vuelva cada vez más fácil.

 

3: Desapégate del Resultado

Entrenarte para dejar ir  y la razón por la que deberías hacer esto es muy sencilla: Cuanto más te aferras a algo más fuertes son las señales de “necesidad” y “carencia” que comunicas al universo, lo que solo puede crear más instancias de necesidad y carencia.

Por otro lado, cuando dejas ir y tienes confianza y fe, comunicas una sensación de bienestar, la cual el universo replicará en tu vida.