Como siempre se ha sabido la cantidad de calorías diarias que quema una persona depende de su actividad física, la proporción de grasa y músculo que tiene su cuerpo y la velocidad de su metabolismo lento.
Una persona con metabolismo lento quema pocas calorías y tiende a ganar más peso que otra que come y ejercita en igual cantidad, pero tiene un metabolismo más ágil.
Sin embargo existen otros factores en el proceso como la edad, el sexo, la genética y la masa muscular. El metabolismo es más acelerado en los hombres que en las mujeres, y se va haciendo más lento con los años, especialmente a partir de la menopausia.
Al día de hoy no hay evidencias de alimentos específicos capaces de aumentar el ritmo metabólico por lo que la mejor forma de quemar más calorías y perder peso es aumentando la actividad física, ya sea aeróbica o de fuerza. De todos modos, hay algunos hábitos para ayudar al metabolismo.
1. Aumenta la actividad física.- Hacer al menos 30 minutos de ejercicio. Los expertos aconsejan variar la actividad para que el cuerpo no se acostumbre y se produzca estancamiento y lo ideal es combinar ejercicios aeróbicos (caminar, bicicleta, correr) con ejercicios de resistencia (pesas, yoga, Pilates)
2. Come menos.- El cuerpo quemar calorías aún en reposo, pero a medida que se envejece, este proceso se hace cada vez más lento. Después de los 40 años, el metabolismo se pone un 5% más lento cada diez años. Por lo cual gasta menos calorías, y si se sigue comiendo lo mismo, se produce aumento de peso.
3. Actividad aeróbica más intensa.- Esto permite activar el metabolismo, incluso unas horas después de haber hecho la actividad. La clave es hacer el entrenamiento con esfuerzo y aumentar la intensidad del trabajo. En estos casos “rinde” más hacer menos tiempo de ejercicio activo que más minutos de uno lento o moderado.
4. Ejercicios de fuerza muscular.- Si se aumenta la masa muscular se puede subir la tasa de metabolismo basal en un 40%. Para desarrollar más músculos no es necesario mucho peso sino varias repeticiones.
5. Mantén el cuerpo hidratado.- el cuerpo necesita combustible para quemar calorías, y lo obtiene del agua. Por eso es importante beber al menos 8 vasos de agua al día y consumir frutas y verduras, para asegurarse que el cuerpo pueda funcionar perfectamente. Un cuerpo deshidratado disminuye su actividad como método de protección.
6. Más alimentos que aportan calcio.-Es importante ingerir productos lácteos magros (queso, yogur), tofu, salmón y avena, para mantenerse en línea, hay que preferir los productos descremados y no ingerir más de dos porciones diarias.
7. Distribuye tu comida 5 o veces al día.- También se logra llegar con menos apetito a la hora de las comidas principales. Elige alimentos con mucha fibra y proteína, como quesos de bajas calorías, galletitas integrales, frutas, vegetales y yogur griego. El cuerpo gasta energía para digerir los alimentos y si le aportas solo 2 o 3 comidas vas a gastar menos calorías en la digestión y tu metabolismo se volverá vez más lento.
8. Come alimentos picantes.-Se cree que los picantes como los chiles, jalapeños, wasabi y pimienta de cayena contienen compuestos químicos que aceleran el metabolismo basal en forma temporaria. Al ingerirlos da sensación de ardor, y la ingesta asidua lograría agilizar el metabolismo.
9. Toma té verde y oolong.- Las sustancias de estas variedades de té como los polifenoles, la cafeína y la catechína que son las que permiten acelerar el metabolismo.