La actividad física reduce la ansiedad, ayuda a eliminar la depresión y por supuesto se nota mejoría en la salud.
Y la realidad es que no se necesita realiza una actividad física intensa, con solo investir 20 minutos diarios en una caminata alrededor de la casa será suficiente.
En un estudio que se realizo durante cuatro años se determino que el tiempo necesario de invertir para ayudar a una persona a salir de una depresión es tan solo de 8 minutos sin embargo debemos incentivar a las personas que sí lograron moverse durante 8 minutos logran mantener la caminata 12 minutos más.
Este es un hallazgo importante, porque se ha visto que el tipo de ejercicio que se necesita depende de las características específicas del paciente, lo que demuestra que los tratamientos pueden necesitar ser adaptados a cada persona.
El estudio, arrojo que el ejercicio moderado es más eficaz para las mujeres con antecedentes familiares de enfermedad mental, mientras que el ejercicio intenso es más útil para aquellas cuyas familias no tienen un historial de la enfermedad.
En el caso del hombre el ejercicio intenso es el más beneficioso, independiente de otras características del paciente.
Con tan solo dejar el sedentarismo se obtienen muchos beneficios principalmente en personas con problemas de obesidad o sobrepeso.
La depresión y la ansiedad deben ser tratados con una actividad física de preferencia al aire libre para que la persona salga de su estado distrayéndose y manteniendo su cabeza ocupada en cosas proactivas.