La magia que produce correr

Muchas son las mujeres que hoy en día hacemos algún tipo de ejercicio, que son por diversas razones unas corren para perder peso, otras para mejorar sus marcas, algunas para liberarse del estrés acumulado a lo largo del día.

Pero mas allá del simple ejercicio los beneficios de correr son mucho y para muestra te presento algunos de ellos:

Pensar con más agilidad: El cerebro se oxigena más al mejorar la circulación derivada del ejercicio.

Dormir mejor: Debes saber que las actividades intensas como correr mejoran la calidad del sueño, así que si duermes mal no dejes de correr al final del día. Pero deja pasar unas tres horas entre el final de tu sesión y el momento de irte a dormir.

Mejorar tu estado de ánimo: Un reciente estudio encontró que con sólo 10 minutos de carrera suave, el humor mejora y la fatiga disminuye.

Aumentar tu deseo: La testosterona, que es la hormona encargada del deseo sexual, aumenta considerablemente de nivel inmediatamente después de haber corrido además el ejercicio aumenta la sensación de autoconfianza, lo cual mejora las relaciones sexuales. Un tip: si corres con tu pareja, es probable que al acabar el entrenamiento siga la fiesta.

Bajar tu presión sanguínea: Analizando los tiempos de carrera de diferentes personas que practican atletismo, los mejores tiempos los logran las personas con una baja presión sanguínea.

Prevenir el cáncer: Practicar ejercicio regularmente es una de las mejores formas de protegerte contra el cáncer. La clave está en la cantidad de calorías que consumes diariamente y en correr a un ritmo alto para quemar más grasa que con las carreras suaves.

Prevenir la diabetes: Varios estudios han encontrado que mientras más ejercicio se hace, menor probabilidad se tiene de desarrollar diabetes. Las personas que practican al menos cinco veces por semana algún ejercicio, muestran un riesgo notablemente menor de volverse diabéticas, que quienes lo hacen sólo un día a la semana.

Aumentar el nivel de colesterol bueno: Los corredores de distancias largas tienen los niveles más altos de colesterol bueno (HDL), encargado de evitar el depósito de los ácidos grasos en las arterias. Podrías hacer todas tus carreras un poco más largas, pero si no estás acostumbrada a correr muchos kilómetros, una forma más sencilla es hacer una sola carrera larga a la semana e ir aumentando poco a poco.

Reforzar tus huesos: La carrera cuesta arriba combina dos actividades benéficas para tu sistema óseo: ejercicio cardiovascular y entrenamiento de fuerza. Al correr, obligas a tu cuerpo a sostener su peso, estimulándolo a aumentar la densidad del hueso. Y con la resistencia extra de la cuesta arriba, tienes una actividad perfecta para reforzar tu sistema óseo.