Hoy en dia existen algunos mitos acerca del colágeno; que tan bueno o malo es o si tiene o no que ver con el envejecimiento o si las cremas que contienen colágeno ayudan verdaderamente a retrasar los signos de la edad.
La realidad es que el colágeno es una proteína que no sólo se encuentra en nuestra piel, sino que puede llegar a constituir hasta un 30% de las proteínas de todo nuestro cuerpo.
Colágeno Oseo: Es un polímero formado por colágeno y fosfato de calcio.
Colágeno de los tendones: Es un colágeno que posee más rigidez y una resistencia a la fuerza de tensión formidable.
Colágeno de la piel: En la piel, las fibras de colágeno se encuentran más apretadas lo que le permite expandirse y esto es lo que le da elasticidad a la misma.
Colágeno de los vasos sanguíneos: Las venas y arterias están formadas por colágeno entrelazado en forma de red que les brinda alta elasticidad.
Su rol dentro del papel del envejecimiento es muy importante, ya que con el tiempo la dermis va perdiendo colágeno, ocasionando una disminución en sus capacidades de sostén, solubilidad y poder hidratante de la piel, causando que pierda hasta un 7% de su grosor cada 10 años.
Por ello, los buenos cuidados son indispensables para lograr una buena apariencia, salud de la piel, así como para retrasar la aparición de arrugas y la mejor manera de lograr esto es con el uso de cremas con ingredientes específicos que pueden ayudar a retrasar el uso de cualquier método quirúrgico.
Una de las alternativas a la cirugía plástica facial es la utilización de rellenadores de piel. Para rellenar la piel se utilizan inyecciones de colágeno (de orígen vacuno previamente solubilizado) que tiene una duración de 6 meses aproximadamente. También se utilizan inyecciones de la toxina botulínica conocidas como botox que tienen una duración mayor pero más posibles efectos colaterales.