Con respecto a la relación de Mamá/Bebé y la conexión que hay entre ellos al momento de amamantar hay muchas teorías y muchas mas leyendas.
La recomendación por la Organización Mundial de la Salud es alimentar a los niños exclusivamente con leche materna hasta los seis meses y como complemento de la alimentación familiar, hasta los dos años, con ello se afirma que no existe ningún afán en buscar un destete antes del segundo año de los pequeños.
Debemos entender el proceso de abandono del seno, no solo desde el punto de vista nutricional, sino también emocional y social. “Los niños alimentados con leche materna reciben todos los nutrientes indispensables para su adecuado crecimiento y desarrollo: son personas con un sistema inmunológico fuerte, se adaptan más fácilmente a las diferentes situaciones y su progreso intelectual es excelente”. Ahora los psicólogos manifiestan que “amamantar a un pequeño fortalece el vínculo entre él y su madre, lo que redunda en mayor seguridad y la construcción de una relación afectiva. Además, el niño recibe información sensorial, cognoscitiva y emocional”. Es verdad que en muchos estudios no se informa sobre una edad exacta en la cual se le debe quitar el seno al pequeño y tampoco se establecen reglas rígidas al respecto, pero algunas teorías coinciden en que los bebés abandonan la lactancia entre los 12 y 24 meses.
Otro de los puntos a tratar es que este proceso debe darse de forma lenta y cuidadosa, evitando cambios acelerados, redundantes en un daño físico y emocional del niño. Es decir si un bebé pide ser amamantado después del año y la madre quiere continuar haciéndolo es bueno para los dos. El destete es algo gradual que se va estableciendo en la
medida en que el niño va explorando nuevas formas de alimentarse. Algunos neonatólogos afirman que una vez cumplidos los 6 meses, el niño ya empieza a recibir alimentación de la casa, donde se incluyen papillas, sopas y algunos alimentos sólidos, este puede ser un buen momento para empezar proceso de ver la leche materna
como única alimentación.
Los especialistas recomiendan que se vayan agrandando los tiempos entre una toma y otra, esto propiciara que pueda entrar la nueva alimentación que es mas solida y por ende les llena mas. Es importante hacer la observación de que mientras el bebe se siga pegando al seno se seguirá produciendo leche. Lo mejor es confiar en los instintos de Mamas, siempre orientados por su Pediatra, este es proceso natural tanto para la mama como el bebe, por ello es importante no obligar al niño a hacer cosas.
Todo llegará en su momento si se le otorgan las herramientas necesarias y se siguen los indicaciones para cada etapa de su crecimiento.