Se ha descubierto que la actividad física tiene un impacto positivo para reducir las alergia
El ejercicio al aire libre es muy beneficioso para los pequeños, salir de casa, correr, jugar en el parque, y, sobre todo, respirar hondo.
La actividad física actúa en el sistema inmunológico, por lo que los niños con algún cuadro de alergia deberían practicar deporte para reducir sus síntomas y mejorar el sistema respiratorio, cardiovascular y muscular.
La creencia era que si tenias algún niño en casa con algún tipo de alergia lo mejor era limitar cualquier actividad deportiva por miedo a que sufriera algún ataque de asma
Lo cual se ha comprobado que es totalmente erróneo ya que, solo uno de cada cinco niños asmáticos podría tener problemas para realizar ejercicio físico, y solo en estos casos mediante un diagnostico se podrá determinar que no podrá realizar actividad física y recibirá un tratamiento que resuelva su situación asi le permita jugar y comportarse como los niños sanos.
Debemos siempre incentivar a los pequeños a mejorar su condición física eligiendo algún deporte de su gusto mejora pues su calidad de vida, reduciendo el riesgo de que se produzcan crisis.
Es fundamental acudir siempre antes a un alergólogo pediátrico para iniciar el tratamiento adecuado. Además, y para prevenir antes que curar, lo ideal sería practicar ejercicio en un entorno controlado.
Hoy en dia existen actividades físicas más recomendables como por ejemplo el tenis, el voleibol, las artes marciales o la natación, en las que se el esfuerzo es progresivo y hay más descansos.