Tú eres la única que puede lograr que todo salga perfecto si quieres que alcanzar tus sueños el empleo ideal, la pareja correcta o cumplir tus metas tus mejores cartas de presentación serán tu imagen, tu actitud y tu sinceridad.
Para conseguir lo que quieres tanto en el trabajo como en la vida diaria, se necesita de muchos esfuerzos, pero no lograrás nada si tú misma no crees lo suficiente en que lo puedes obtener.
Por eso primero debes establecer muy bien en tu mente tres frases clave: confianza en ti misma, autodisciplina y perseverancia.
La confianza en ti misma se refleja en todo tu comportamiento:
• El apretón de manos: Es uno de los detalles que revelan tu carácter. Dale energía a tu presentación con un apretón fuerte pero cálido. Debe ser corto, firme y decidido, pero sin rudeza. No lo hagas muy breve porque puede demostrar falta de interés de tu parte, ni demasiado largo porque puedes parecer un poco empalagosa y evita agitar la mano. El apretón debe ir acompañado de una mirada directa.
• Tu voz: Es un instrumento de presentación muy importante. Una voz clara y bien modulada es trascendental para crear un buen efecto en los demás. Los tonos de voz agudos son irritantes y los tonos monótonos aburren al oyente. Si adoptas una tonalidad indecisa, transmitirás que la inseguridad te sale por cada poro de la piel. Si buscas un puesto de gerente o directora, no concuerda una forma de hablar dulce, aniñada o superficial.
Ante todo la actitud dictara la forma en que obtengas lo que deseas siempre debes tener una actitud optimista:
• No sobrevalores: Dale a los retos el lugar que se merecen y ordénalos por prioridades, estableciendo el lugar de tus necesidades personales según el momento presente en tu vida. Esto te ayudará a ver las cosas con claridad y a valorarlas en su justa medida. Pregúntate qué es primordial para ti en este momento de tu vida, si aceptar un trabajo con excelente sueldo pero para el que tienes que recorrer diariamente 100 kilómetros, o un menor sueldo en un empleo más cercano a donde vives.
• Transmite lo positivo: No siempre somos optimistas, pero no escatimes nunca en ver el lado hermoso de la vida; vale la pena ponerte de ese lado porque es el que más satisfacciones te dará y sólo así podrás transmitirlo a los demás. Probablemente sientas que tu trabajo vale más que el sueldo que te ofrecen en ese puesto, pero mientras más demuestres tus capacidades, con el tiempo te recompensarán mejor.
Debes mostrarte siempre segura de ti misma en los pasos que das en la vida dicen que la peor decisión es no decidir pues bien analiza bien las situaciones y toma decisiones
• Autoanalízate: La autocrítica es indispensable para avanzar, así que haz un cuidadoso análisis de ti misma y reconoce tus capacidades y tus limitaciones. Conocer qué es lo bueno que hay en ti te hará saber cómo destacarlo al máximo.
• Sé honesta: Sé franca y examina de ti misma qué cosas menosprecias que sí están bien y qué cambiarías que no está bien. Tal vez no te gusta ser tan exigente con los demás pero es necesario que lo seas si te ponen a cargo de un equipo de gente
• Sé optimista: Cuando estás luchando contra la adversidad y cargas con pensamientos negativos, encontrarle solución a los problemas es mucho más difícil y los ves más grandes de lo que en realidad son.